La fotografía tiene que ser vista como una labor creativa, profesional y económica que exige tanto de conocimientos técnicos y del manejo de la imagen, que se adquieren realizando un curso de fotografía digital, como del desarrollo de la capacidad expresiva y comunicacional al servicio de los distintos sectores que lo requieran.
Hoy, no se pueden concebir las publicidades, las revistas, los envases, las páginas en internet, los artículos periodísticos, el cine y los diversos campos del diseño, el arte y la cultura sin contribución de los profesionales de la fotografía.
El fotógrafo profesional estará capacitado para hacer y diseñar producciones fotográficas artísticas y comerciales de alta técnica y estética, dominando los conceptos profesionales de la imagen, la comunicación escrita y verbal y con buen tino. Tiene la capacidad de resolver inconvenientes y de proponer nuevas variantes creativas, en cualquiera de los campos de trabajo que le sea designado.
Asimismo, está capacitado para diseñar productos fotográficos, publicitarios y comerciales en general para dinamizar la labor productiva y económica, comunicarse mediante un lenguaje visual claro, de contenido cultural afín a nuestro medio, y desarrollar facultades en los diferentes medios de reproducción fotográfica y gráfica.
Existen infinitas posibilidades donde aplicar la fotografía, por esta causa el fotógrafo profesional debe poseer la mayor cantidad de herramientas que le permitan adaptarse a cada una de ellas y a los diversos roles.
La difusión de los medios de comunicación y el alocado ritmo de vida moderno potencian la relevancia de la imagen como medio de información. La publicidad, el diseño, el periodismo, son áreas donde la fotografía posee una gran incidencia.